Ecuador
Instagram: @veraprimavera
Graffitera y tatuadora ecuatoriana. En ambas disciplinas su trabajo gira en torno al misticismo, la magia, la intimidad y la mujer. Como graffitera explora la imagen de la mujer en la urbe haciendo ejercicios de reivindicación de esta, reclamando un espacio visual que por décadas ha sido tomado por el capitalismo a través de la publicidad, plagando nuestras ciudades de imágenes femeninas con una visión distorsionada, patriarcal y consumista.
Las mujeres que Vera pinta tienen una feminidad compleja, intranquila, imponente, dura y sutil al mismo tiempo, captura la magia que ve en las mujeres que le rodean, que va conociendo en el camino y en ella misma; adentrándose en facetas profundas, espirituales y naturales. Retrata la feminidad desde su propia visión por lo que su trabajo es muchas veces autobiográfico, cada muro tiene una historia y una carga de cuestionamientos, descubrimientos, miedos, alegrías y sensaciones.
Ha pintado murales alrededor del mundo en múltiples ciudades entre ellas: Chihuahua y CDMX en México, Bogotá Colombia, Quito, Cuenca y Ambato en Ecuador, Trier, Limbach-Oberfrohna y Mühldorf en Alemania, Viena en Austria, Esch-sur-Alzette en Luxemburgo, Lyon y Saint-Dié-des-Vosges en Francia, New York y Harrisburg en USA y Loures en Portugal.
En su proyecto como tatuadora, "Rituales Mínimos", Vera indaga en la fuerza simbólica del ritual; se convierte en bruja y diseña conjuros que graba en la piel con múltiples propósitos como la protección, sanación, evocación. Su objetivo es permitir a su portador poner su intención en un ejercicio de empoderamiento del cuerpo y sus campos espirituales para poder manifestar en su vida anhelos elevados. Tatúa a mano, sin máquina, que, en contraste con su actividad como grafitera, alimenta su necesidad de intimidad, suavidad, detalle y paciencia.